22 de April de 2025, 8:46 — Por Carmen Ríos, RADAR LOCAL
El auge del trabajo remoto ha impulsado la proliferación de espacios de coworking en Madrid, especialmente aquellos orientados a perfiles tecnológicos. En el barrio de Arganzuela, por ejemplo, se ha inaugurado un centro de más de 2.000 metros cuadrados equipado con salas de videoconferencia, servidores dedicados y asesoría para startups.
Los usuarios valoran la flexibilidad horaria, la posibilidad de establecer sinergias con otros profesionales y el acceso a herramientas especializadas. “Es más que un lugar donde trabajar; es un ecosistema de innovación”, afirma Jaime, desarrollador de software.
Este tipo de espacios también promueven la formación continua mediante talleres y charlas sobre temas como inteligencia artificial, blockchain y diseño UX. Algunos incluso ofrecen programas de incubación para nuevos proyectos tecnológicos.
Las tarifas son variadas, con opciones que van desde media jornada hasta puestos fijos mensuales. Varios centros cuentan con financiación pública o están ligados a universidades y aceleradoras de negocios.
Con una demanda creciente, se espera que Madrid se consolide como una de las ciudades europeas con mayor densidad de coworkings tecnológicos. El Ayuntamiento está estudiando incentivos para fomentar su desarrollo en barrios periféricos.
Los gestores de estos espacios insisten en el valor comunitario que ofrecen, promoviendo redes de contacto, mentoría y colaboración que impulsan la competitividad del ecosistema digital madrileño.